No porque haya conseguido todo lo que quiero, sino porque he sabido encajar las derrotas con un control elegante y sin ataques de ansiedad. Porque he bebido las victorias lentamente y con un placer indescriptible, a falta de otras cosas que me hagan sentir lo mismo. Porque no he pedido más de lo que se me ha ido concediendo a lo largo del mismo, y todo lo he considerado como un verdadero regalo.
Porque he conocido personalmente a gente MARAVILLOSA, como a algunas de las co-autoras de este blog, que me han hecho ver y vivir mis pequeñas catástrofes diarias con una gran dosis de humor y sin darles más importancia de la que tienen.
Porque he sabido decir que NO cuando lo he sentido, y lo que sentía cuando ha hecho falta. Porque he sentido tristezas hondas, que me han ayudado a seguir creciendo y a tener al día siguiente sonrisas más intensas.
Y, sobre todo, porque en cada momento he tenido presente lo que valgo, como profesional y como mujer, pese a que los hay empeñados en que no sea así.
El año que comienza seguiré aprendiendo y seguiré sintiendo en el alma que haya tanto caballero ciego, sordo y mudo en el mundo... y otras cosas ;)))
¡¡¡FELICES FIESTAS Y FELIZ AÑO NUEVO NADA CATASTRÓFICO!!!
Qué bonita eres, nena... ;)
ResponderEliminarOléeeeee! Namasté ;D
ResponderEliminarY yo que me alegro de ello. ¡Un besino grande, grande!
ResponderEliminar¡Cuánto que aprender de ti!
ResponderEliminarAquí hay mucha gran mujer... gracias a todas por ser como sois y por estar juntas, pese a las distancias. Muaaaaa, guapassss!!!
ResponderEliminarGracias por compartir tus pensamientos. Pienso que los años me han hecho madurar y como tú he podido ver las cosas de otra manera menos traumática y más agradable para todos.
ResponderEliminarOs deseo a todas unas Felices Fiestas y que el 2012 os traiga todo lo que le pidáis.
¡Y que vengan muchas catástrofes como esta! ja, ja ,ja.
Muchos besos.