miércoles, 5 de octubre de 2011

Las catástrofes controladas son menos catástrofes


Hacer una maleta sin duda es un dilema (por lo menos para mí) y no por mucho viajar y hacer y deshacer maletas aprendes para las ocasiones venideras. Me deben de quedar todavía muchísimos viajes para llegar a ser una experta.

Primero porque no sé exactamente qué llevar y siempre me llevo de más (los dichosos 'porsiacaso') y, a la vuelta, porque traigo más todavía de lo que me llevé, ¡aunque solo vaya a ver a mi madre!
Mañana nos vamos tres días al III Congreso Nacional de Escuela 2.0 en Granada y me dispongo a hacer la maleta. Toca organizarse para que la tarea me cause el menor quebradero de cabeza posible y no se convierta en la catástrofe de hoy.
Lo primero elegir qué maleta: me voy a decantar por la mediana que vamos dos. Esto es fácil. Ahora viene lo peor como dije antes: Qué me llevo... qué no me llevo... que no sea mucho... que no sea poco... por si hace calor... por si hace frío... que sea cómodo pero resultón... qué complementos...
A ver, tengo información: conozco el sitio a dónde voy a ir (Granada), el tiempo que va a hacer, (calor de día, fresquito por la noche), los sitios a los que voy a acudir (Palacio de ferias y congresos) y el ambiente con el que me voy a encontrar (docentes a tutiplén), con lo que puedo contar o no en el sitio en el que me voy a alojar (Hotel de ****). Entonces, alma de cántaro, ¡a qué viene este bloqueo!
Voy a buscar la lista que tengo hecha de otros viajes. No la encuentro y, total no me iba a servir, era una lista para un viaje de quince días. Recapacito: ¡qué son tres días y no te vas a las antípodas!
Preparo las cosas (que sin organización no se llega a ninguna parte): las coloco encima de la cama para tener una visión global. ¡Que no se me olvide que no voy sola! Media maleta es para el 'meu home'. A ver si consigo no arrebatarle su parte de espacio.
Y ya solo me queda empacar todo en la valija, como dirían mis amigas del otro lado del charco. ¡Manos a la obra!


2 comentarios:

  1. Soy una negá haciendo maletas. siempre me sobra o me falta ropa.
    Tenía dos compañeras que hacían las maletas a sus respectivos maridos, yo alucinaba con ellas, yo sería incapaz no es por nada pero tengo que confesar que cuando mi hija era pequeña su padre era el encargado de hacerle la maleta a la niña.

    Ely

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    1. Yo ya me estoy comiendo el coco con lo que me voy a llevar al EABE12, desde luego no me imagino haciendo la maleta de otros como las compañeras de Ely, en mi casa cada uno hace sus maletas … Mi hija desde muy pequeña se hacía la maleta solita…

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